Emergencias. Un equipo especializado mejora la respuesta.

El primer equipo hospitalario dedicado exclusivamente a urgencias logró mejorar los tiempos de espera en un 10% en su primer año de funcionamiento, reducir los casos no urgentes y reforzar la respuesta a los pacientes graves, anunció este martes la ULS São José.

Al final de su primer año de funcionamiento, el Centro de Responsabilidad Integrada del Servicio de Urgencias (CRISU) de la ULS São José, en Lisboa, presenta resultados que confirman una “apuesta ganadora” , declaró a la agencia de noticias Lusa la administradora del hospital, Miriam Viegas.

“ Este proyecto piloto trajo al servicio de urgencias la posibilidad de organizar el trabajo de una forma diferente, más flexible, con capacidad de retener y atraer profesionales, lo que realmente nos permitió mejorar algunos de los resultados del mayor servicio de urgencias del país” , destacó el administrador del CRISU.

Miriam Viegas señaló que, en términos de tiempos de espera para la primera cita médica, hubo una mejora del 10%: alrededor del 80% de los usuarios logran ser atendidos dentro del tiempo meta determinado, previo triaje por parte de la enfermera.

También se optimizó el alta del servicio de urgencias, con un incremento del 32% en las derivaciones a consultas externas programadas, ya sea en atención primaria, atención hospitalaria, consulta posturgencia u hospital de día.

En la valoración realizada a Lusa, Miriam Viegas destacó también la reducción de alrededor del 5% en la tasa de usuarios frecuentes de urgencias y la disminución del 30% de usuarios fuera del área de influencia del hospital.

Por otro lado, el número de pacientes en el área de influencia de la ULS ha aumentado, al igual que los casos prioritarios (amarillo, naranja y rojo) que han subido un 10%, situación que “genera una gran presión en urgencias”.

Actualmente, el 62% de los pacientes en urgencias son prioritarios, lo que ha incrementado el tiempo medio entre la primera observación y el alta en 30 minutos.

Para reducir el número de pacientes no urgentes en el servicio de urgencias multiusos general, la ULS creó respuestas paralelas como la Clínica de Atención de Urgencias (CASU) que se ocupa de estos casos.

El proyecto “Llama primero, salva vidas”, que obliga a los pacientes a llamar a la Línea SNS 24, también ha aliviado la carga de estos casos y ha sacado a los usuarios fuera de su zona de influencia, que luego son derivados a hospitales de sus zonas.

El Centro de Responsabilidad Integrada del Servicio de Urgencias de São José fue el primero de cinco proyectos piloto lanzados por el Ministerio de Salud, seguido por el CRISU de la ULS de Coimbra, que inició su actividad el 1 de octubre y cuenta con 290 profesionales.

El CRISU São José cuenta con más de 300 profesionales y está cerca de alcanzar los 330 previstos. Actualmente cuenta con 21 médicos, 140 enfermeros, 84 auxiliares operativos, 35 auxiliares técnicos y 22 técnicos superiores de diagnóstico y terapéuticos.

El hospital espera reclutar rápidamente nueve o diez médicos más para ampliar el horario diario actual de 12 horas (08:00 - 20:00) a 24 horas a finales de este año.

Con este refuerzo, el servicio ya no dependería tanto de otros equipos, especialmente de Medicina Interna, que también pasa por una fase más complicada y necesita ser reforzada, afirmó Miriam Viegas.

El objetivo es también que este modelo sea un valor añadido en la construcción de nuevos servicios de urgencias en el SNS en los próximos años, teniendo en cuenta la creación de la especialidad de urgencias y emergencias.

“Estamos allanando el camino. Nuestros médicos también están solicitando la especialidad, por consenso, para que podamos estar capacitados para comenzar a formar internos en esta especialidad y, en 4 años, contar con un servicio de urgencias mucho más sólido y preparado para los desafíos actuales”, destacó Miriam Viegas.

La ordenanza que creó CRISU prevé incentivos económicos de entre el 15% y el 25% del salario de los profesionales, siendo el 25% condicionado al cumplimiento de objetivos de desempeño.

Para Miriam Viegas, esta medida fue un valor agregado de este proyecto y los 300 profesionales reciben un incentivo, pero dijo que están esperando una respuesta del Ministerio de Salud sobre el pago de ese 25% que depende de cumplir las metas estipuladas.

El enfermero gerente de CRISU, Paulo Barreiros, dijo que espera que este aspecto sea resuelto pronto por el Ministerio de Salud, para “mejorar y mantener el buen espíritu que ha reinado desde el punto de vista del trabajo en equipo”, que es un equipo que es multidisciplinario.

Para Paulo Barreiros, los usuarios también tienen motivos para estar contentos porque se trata de “un servicio que ha garantizado una respuesta en varias áreas y en diferentes especialidades y ha mejorado los indicadores”.

“Somos un hospital donde el servicio de urgencias nunca ha cerrado sus puertas. Ni el servicio de urgencias ni las distintas especialidades que lo conforman” , concluyó Miriam Viegas.