Prisión, banco, embajada: en estos hoteles de Berlín se respira historia

Antiguamente una cárcel de mujeres, hoy la casa de huéspedes más bonita de la ciudad: en Berlín, muchos hoteles han trasladado con estilo la historia de sus edificios al presente.

Habitaciones de hotel con historia: en el Wilmina, los huéspedes duermen en las antiguas celdas de la prisión. Patricia Parinejad

Desde la cama, la vista se extiende a través de una habitación luminosa y sencillamente amueblada en estilo escandinavo. Entre los pocos objetos decorativos se encuentran hojas prensadas detrás de un vidrio. El cielo fuera de la ventana es gris. Está bloqueado, pero sólo hasta la mitad, por lo que escapar sería una opción. ¿Es esto lo que se siente estar encerrado, encarcelado o confinado?

En realidad una pregunta retórica en un hotel de lujo. Sin embargo, durante la Segunda Guerra Mundial, aquí fueron encarcelados los combatientes de la resistencia alemana y, más tarde, también los delincuentes juveniles. ¿Es lícito hacer mal uso de un lugar tan cargado?