La piedra de 20 quilates en una cuerda de Zoe Kravitz podría ser la única forma elegante de lucir diamantes gigantes

¿Importa el tamaño? Al menos en el caso de los diamantes , el consenso general es que cuanto más grande, mejor. Y aunque para nosotros, los simples mortales, eso solo podría significar la diferencia entre un anillo de compromiso de medio quilate y uno de un quilate (¡si acaso!), este concepto alcanza un nuevo nivel en el mundo de las celebridades.

Si alguna vez necesitábamos una prueba de que la era del "lujo discreto" ha terminado, es el tamaño de los diamantes que parecen estar inundando nuestros feeds últimamente. Primero fue el espectacular anillo de compromiso de diamantes rosas de Lauren Sanchez , cuyo peso se estima en unos 20 quilates. Luego, el anillo de bodas que lució en sus nupcias venecianas, con un diamante ovalado tan grande que hace que el primero parezca sutil.

El anillo de compromiso de Georgina Rodríguez sigue esta misma línea. La novia de Cristiano Ronaldo, ahora prometida, compartió una foto en Instagram de su propio anillo de diamantes de un megavatio a principios de esta semana, lo que desató de inmediato el debate sobre qué tan grande es demasiado grande, especialmente para una pieza de joyería que supuestamente está diseñada para usarse a diario. ¿Es tan grande como para resultar realmente incómodo? ¿Y en qué momento preciso una piedra preciosa rara pasa de ser impresionante e imponente a simplemente vulgar?

En comparación, casi ni me fijé en el diamante de 20 quilates que colgaba del cuello de Zoe Kravitz en una reciente aparición televisiva. Quizás sea un síntoma de ceguera por los diamantes: estamos tan acostumbrados a que nos pongan piedras gigantescas e increíblemente raras delante de la cara en redes sociales que cualquier cosa más sutil simplemente ya no nos importa.

O, más probablemente, la sutileza era precisamente la clave. Con su estilo típicamente irreverente, Kravitz lució dicho diamante Oval Eclipse de 20 quilates —diseño de Jessica McCormack— colgado de forma informal de un cordón, en una (literalmente) brillante actualización del collar colgante de cuerda de los noventa, tan de moda. Era simplemente la adición definitiva e inesperada a su atuendo informal —compuesto por un chaleco negro corto, pantalones de raya diplomática, pañuelo y gafas de sol deportivas Nike plateadas—, en lugar de una ostentosa exhibición de riqueza.

«Actualmente, los diamantes jumbo de gran tamaño son tendencia», explica la joyera de lujo Rachel Boston . «Son un guiño a un espíritu más maximalista en la moda y la joyería tras años de minimalismo».

No es de extrañar que Rodríguez, Sánchez y Kravitz optaran por piedras de corte ovalado: "El corte favorito actual parece ser el ovalado, probablemente porque favorece la mano y el cuello, alarga la silueta y ofrece una gran diferencia de tamaño para su peso en quilates, por lo que se ve aún más grande a simple vista", dice Boston.

Las redes sociales y la contentificación de la vida de las celebridades también han contribuido a la idea de que "cuanto más grande, mejor". "En una era dominada por las redes sociales, la magnitud de estos diamantes impresiona y crea una especie de abreviatura visual de lo ultra raro", explica Boston. "Y con el creciente acceso de los diamantes cultivados en laboratorio a las masas, las celebridades podrían sentir una necesidad aún mayor de diferenciarse, buscando piedras que no solo sean naturales, sino tan grandes y raras que estén fuera del alcance de la producción en masa".

Dicho esto, si alguna vez tienes la suerte de considerar agregar un diamante gigante a tu colección, toma ejemplo de Zoe para asegurarte de darle un estilo elegante.