Gucci Otoño/Invierno 2025: una colección clásica pero subversiva
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No ha pasado todavía un mes desde que Sabato de Sarno nos sorprendió a todos al anunciar que dejaba el cargo de Director Creativo de Gucci después de solo dos años.
Mientras esperamos a descubrir quién diseñará a continuación para Gucci (hay rumores de que se trata de Tom Ford), el talentoso equipo interno ha asumido el honor de crear la colección Otoño/Invierno 2025.
¿El resultado? Diseños a la vez clásicos y subversivos, estrictos pero sexys, que hacen un guiño a algunas de las mejores décadas de la casa.
Las modelos caminaron por la pasarela con la G entrelazada de color verde oscuro: las iniciales del fundador Guccio Gucci, un logotipo que este año celebra su 50° aniversario.
La colección adoptó los códigos del pasado, presente y futuro de Gucci, ese sentido distintivo del estilo italiano que es sinónimo de glamour, elegancia y naturalidad.
Había monos de terciopelo adornados con cristales, faldas tubo con lentejuelas, trajes elegantes y vestidos de seda. Trajes aparentemente recatados, socavados por un destello de piel o un toque de color.
En cuanto al color, hubo mucho. Los tonos púrpura, rosa, rojo y verde vibrantes también se reflejaron en la línea de ropa masculina.
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Mencioné un guiño a los archivos de la casa: las siluetas de la década de 1960 prevalecieron en toda la colección, lo cual no es coincidencia, ya que ese fue el inicio de la línea de prêt-à-porter de Gucci.
Guantes femeninos, abrigos tipo guardapolvo, trajes con falda lápiz, minivestidos y pañuelos para la cabeza atravesaron el tiempo y se volvieron más modernos gracias a la incorporación de materiales transparentes y brillantes, tonos vibrantes y detalles exagerados.
Looks más minimalistas, inspirados en los años 90 (bodys escotados, jerséis de cuello alto, chaquetas oversize y trajes ajustados) salpicaron la colección.
En el corazón de todos los accesorios se encontraba otro símbolo de culto de Gucci: el Horsebit (que este año también celebra un gran aniversario: su 70° aniversario).
Mi favorito fue el collar de lazo Horsebit dorado que lucía impecable en todo, desde vestidos con cuello halter hasta camisas con cuello puntiagudo.
El motivo también fue visto en la cadena de la cintura, en el asa gigante del bolso clásico renovado Horsebit 1955 y en el nuevo bolso Gucci Siena.
No hay duda al respecto: la colección Otoño/Invierno 2025 de Gucci será difícil de igualar.
marieclaire