Adiós a La Fura Dels Baus: últimas funciones en Buenos Aires

Era el estreno mundial. Habían elegido Buenos Aires. El espectáculo se iba a presentar durante cinco semanas, hasta fines de marzo. Sin embargo, SONS-Ser o no ser, el último espectáculo de la compañía catalana La Fura Dels Baus, recién se despide de la capital argentina el próximo fin de semana, más de un mes después de la fecha prevista originalmente. Cuatro funciones quedan para presenciar la versión “furera” de Hamlet, uno de los grandes clásicos de William Shakespeare, en la Sala Sin Piso, de GEBA, antes de emprender una gira internacional.
En el corazón de los Bosques de Palermo, llegar a la Sala Sin Piso el domingo del Superclásico es en sí mismo una aventura. Las inmediaciones del Monumental están, en mayor o menor medida, cerradas al tránsito y los colectivos, desviados. El espacio donde se desarrolla el show –“experiencia”, se vende por estos días– es una especie de galpón al fondo de GEBA, de la sede San Martín: Julio A. Noble 4100 para Google Maps.
Presentación en Buenos Aires de La Fura Dels Baus. Foto: Simón Quezada/Prensa
La sala es, en rigor, el espacio otrora utilizado por la compañía FuerzaBruta, heredera, junto a De La Guarda, del estilo teatral de La Fura Dels Baus. Allí, a pasos de la cancha donde River le ganó este fin de semana a Boca, un elenco local –cuatro mujeres, cuatro hombres– interpretará la versión de Hamlet que Carlus Padrissa, uno de los fundadores de La Fura, creó para la ocasión. “Nuestro teatro es el que te provoca y te hace segregar adrenalina”, asegura el director artístico y compositor musical.
En pos de conseguir esa adrenalina, la antesala recibe con una barra con tragos, cervezas y gaseosas que, eventualmente, podrán ingresarse a la sala del show. Después de todo, es una puesta dinámica, en 360 grados, con proyecciones en las paredes y espectadores de pie que van moviéndose por el espacio, esquivando a los intérpretes, acercándose o alejándose de ellos, captando con sus celulares el video o la foto que cosechará likes en alguna red social. Esto es teatro inmersivo.
Sepulturero en el show de La Fura Dels Baus. Foto: Simón Quezada/Prensa
Colgados con arneses, envueltos en film plástico, envasados al vacío o embadurnados en barro de pies a cabeza, los acróbatas serán, a su turno, sepultureros o muertos, almas en pena o fantasmas, zombies o cadáveres, puesto que el show se desarrolla en un cementerio donde Hamlet, salido de una tumba, atenderá el pedido de su padre de vengar su muerte. Pero habrá también referencias a “La vida es sueño” de Calderón de la Barca y una defensa solapada al medioambiente y la escasez de agua dulce, así como una crítica al uso y abuso de materiales plásticos en la vida cotidiana. Poco texto y gran despliegue físico, en combinación con la música y el juego de luces.
Gran despliegue físico en La Fura Dels Baus. Foto: Simón Quezada/Prensa
A su manera, este conjunto español, originado en 1979, revolucionó la manera de hacer teatro al plantear la interacción con el espacio y con en el público en sus espectáculos. No fue sólo romper la cuarta pared: lo hizo en un momento en que España salía de cuatro décadas de dictadura. Sus apuestas experimentales y vanguardistas, en todo este tiempo, alcanzaron a más de cuatro millones de espectadores de todos los continentes.
*Últimas cuatro funciones de SONS-Ser o no ser, de La Fura Dels Baus: 1, 2, 3 y 4 de mayo en la Sala Sin Piso, de GEBA, Julio A. Noble 4100 (y Figueroa Alcorta).
Clarin